Los acelerados avances de la tecnología, que simplifica cada vez más el acceso a la movilidad, han cambiado de forma sorpresivamente rápida los hábitos y las formas de trabajo, a las que apenas hace unos años estábamos acostumbrados.
Las cifras lo revelan: la mitad de los miembros de una oficina comparten información en la nube, la mitad de las impresiones realizadas son desechadas y un 20% de ellas, nunca llegaron a las manos de los usuarios. Definitivamente los flujos de trabajo ya no son los mismos.
Gracias a esa automatización, los procesos de relacionamiento entre grupos de trabajo son ahora más ágiles y efectivos, una nueva forma de trabajo a la cual las empresas han tenido que adaptarse para no quedar rezagadas en esta vorágine tecnológica.
El resultado de un estudio de Accenture acerca del futuro de la fuerza laboral, revela que el 82% de los colaboradores reconocen que las tecnologías digitales van a transformar su forma de trabajar en los años venideros. Un 44% considera que ese nivel de transformación será significativo. Ante este panorama, casi el 70% de ellos evalúan desde ya las nuevas habilidades que la empresa les exigirá en un futuro. Un porcentaje igual está buscando de forma proactiva, adquirir dichas habilidades.
Por su parte, las empresas se centran en ahorrar costos, ser más sustentables y favorecer esta movilidad y la productividad de sus equipos, sin que estos deban sacrificar aspectos como la seguridad en el manejo de la información. La idea principal es sumar procesos innovadores en las labores diarias. Las opciones digitales han venido a simplificar los procesos empresariales y a nivel personal, gracias al entorno de conectividad colaborativa, un proceso que de forma simultánea, preserva los documentos corporativos más sensibles.
Con el fin de alcanzar las metas propuestas, los negocios deben mejorar los procesos documentales y acelerar los flujos de trabajo, una visión que se enfoca en las personas y su información, haciendo más rentable el negocio, y a sus colaboradores más eficientes.
Para responder a estos nuevos desafíos de la fuerza laboral, Xerox ha desarrollado un conjunto de soluciones que se extiende a través de diferentes industrias como la manufactura, la banca y la educación superior, para transformar procesos manuales y propensos a errores en enfoques automatizados y precisos que toman minutos en lugar de días. Además, estas soluciones de automatización organizan información vital proveniente de múltiples fuentes – tanto de papel como de naturaleza digital – que permite a las organizaciones ofrecer contenidos a través de múltiples canales.
Un ejemplo práctico en la industria de seguros, por ejemplo, es el procesamiento de reclamaciones, un proceso común en Seguros que normalmente implica algunos de los siguientes pasos:
1. El asegurado diligencia el formulario suministrado por la compañía de seguros.
2. El empleado escanea este formulario usando una impresora multifuncional