Frank Ranieri, CEO del Grupo Puntacana, visitó Uruguay y cautivó a los asistentes en la Gala de Endeavor, con su mensaje de “solidez, visión y trabajo”. “Si nos hubiésemos sentado a esperar la mano del Estado dominicano, Punta Cana hoy no existiría”, resaltó.
A continuación ocho consejos de negocios del artífice del desarrollo turístico de Punta Cana:
1. Negociación.
“Tenía 24 años y dije que ganaba US$ 800 al mes, aunque ganaba US$ 250. Theodore Kheel (un inversor neoyorquino) ofreció pagarme US$ 1.200 y ahí tomé una de las decisiones más osadas de mi vida: dije que no, que quería ser socio. Me temblaban las piernas bajo la mesa. Me dijo: ‘Te pago US$ 1.000 y si logras todo en tiempo y en el presupuesto, en dos años te damos el mismo número de acciones que tenemos nosotros. Nos dimos la mano. Así comenzó la historia de Punta Cana”.
2. Responsabilidad.
“Un empresario es un dirigente y administrador de negocios. Un emprendedor es un visionario, líder, creador de oportunidades y realizador de proyectos. En ambos casos debemos ser líderes del siglo XXI y comprender los vínculos de colaboración necesarios entre la empresa, la sociedad y los gobiernos”.
3. Actitud.
“Muchas veces hay que tomar decisiones rápidas, que no se basan en estudios de factibilidad. De lo contrario, Punta Cana nunca se hubiera construido. Hay que ser osado, tener nariz de emprendedor y lanzarse”.
4. Realización.
“El éxito de un emprendedor, un empresario tradicional, un líder del siglo XXI o un simple trabajador se basa en el amor, la entrega y la pasión con que realice su trabajo. Para mí Punta Cana ha sido más que un trabajo, ha sido mi vida, mi gran amor”.
5. Colaboración.
“La experiencia de Punta Cana indica que todo hubiera sido más fácil con una mayor comprensión de los políticos del rol de la iniciativa privada en el desarrollo y creación de riquezas”.
6. Burocracia.
“Nos tomó tres gobiernos y siete años conseguir permisos para desarrollar el primer aeropuerto internacional comercial privado del mundo. Y sin ningún costo para el Estado dominicano. ¿Y saben por qué me lo autorizaron? Porque se cansaron de verme la cara insistiendo en pedir los permisos”.
7. Aprendizajes.
“Si tengo que resumir lo aprendido, pienso: Primero, tener capacidad de comprender hacia dónde nos llevan las fuerzas del cambio y los determinantes económicos del futuro. Segundo, abrirse al cambio. Tercero, tener fe y visión para soñar con un futuro promisorio. Y por supuesto perseverancia, para trabajar con ahínco para lograrlo”.
8. Competitividad.
“Si nos hubiésemos sentado a esperar la mano del Estado dominicano, Punta Cana hoy no existiría. (Pero) sin medidas de incentivo el producto turístico no puede competir. Si se quiere turismo hay que acudir a un mercado mundial donde la competencia es agresiva y cada año surgen nuevos destinos. Es necesario asegurar condiciones para que el lugar sea atractivo para la inversión con una equilibrada relación calidad/costo”.