La nueva Guía Michelin de Seúl se presentó hoy con dos nuevos locales en la categoría de dos estrellas y otorgando por primera vez una estrella a un restaurante de comida española en el directorio de la capital surcoreana, que incrementa en cinco el número total de distintivos, hasta los 42.
En esta edición 2020, la cuarta desde que se comenzó a publicar la guía en Seúl, conservan sus tres estrellas dos clásicos de la alta gastronomía surcoreana, Gaon, restaurante del distrito de Gangnam conocido por su recreación de platos clásicos, y Le Yeon, otro establecimiento de cocina tradicional en el hotel Shilla.
A la lista de restaurantes con dos distinciones se unen dos establecimientos, uno de ellos, Mosu, local a cargo del chef Ahn Sung-jae, que en su día trasladó su galardonado negocio desde San Francisco a Seúl (donde ya logró su primera estrella en la pasada edición).
El otro recién ascendido es L’Impression, donde el cocinero Seo Hyeon-min combina sus raíces asiáticas con su experiencia profesional en la alta cocina francesa.
Los otros cinco negocios que tenían dos estrellas en la pasada edición – Jungsik, Kojima, Kwonsooksoo, Migles y Alla prima – mantuvieron los distintivos.
Otros 15 restaurantes galardonados el pasado año con una estrella mantuvieron también sus reconocimientos y a la lista se sumaron siete nuevos establecimientos.
Entre estos se cuenta Terreno, local de cocina española en el barrio de Gahoe en el que Shin Seung-hwan ofrece una cocina de tintes muy naturales -cultiva él mismo gran cantidad de ingredientes- y centrada en la gran calidad del producto.
En total, el volumen menciona 179 restaurantes, 12 menos que el año anterior.
La presentación de esta edición llega también rodeada de polémica después de que el diario Segye publicara documentos esta semana que revelan supuestas comunicaciones entre un establecimiento y un inspector ligado a la prestigiosa guía.
Los documentos muestran al supuesto inspector dando un preaviso sobre su visita para evaluar el local (algo que prohíbe la guía) y también ofreciendo al establecimiento un ‘servicio de asesoría’ a cambio de más de 40.000 dólares al año (más de 36.000 euros).
No es la primera vez que la edición de Seúl se ve envuelta en polémica, ya que en 2017 un parlamentario acusó a la organización nacional de turismo surcoreana (KTO) de financiar el lanzamiento del primer volumen, que se publicó a final de 2016, con el pago de cientos de miles de euros.